Bautismo de fuego. [One-Shot]

Hace mucho que no posteo algo aquí, así que me decidí a hacer un pequeño One-Shot para mi diversión y la de los que lo lean. Dudo que tenga continuación alguna, ya que es una historia improvisada. xD

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Medianoche. Las negras nubes de tormenta cubrían el cielo casi por completo, pero aún así el brillo de la luna se hacía presente, bañando entre las nubes con su luz aquél extenso campo de hierba alta, luz más fuerte que en ninguna otra noche, como si esta fuera a saber lo que allí ocurriría, como si lo hubiera sabido desde que comenzó a iluminar por primera vez.

El silencio parecía impenetrable y eterno, pero pronto fue roto por el ruido de agitados pasos entre la hierba. Una figura corría en el campo cargando algo entre sus brazos. La luna iluminó su rostro y se pudo apreciar a una joven mujer cargando a un bebé. Esta corría de forma agitada, como si estuviera siendo perseguida. Y así era, pronto se pudo ver a un grupo de cinco hombres con armas en mano, el cual se detuvo un poco más atrás.

Ninguno de ellos podía ver mucho más de lo que era iluminado por la luna, pero el más bajo de ellos apuntó con su dedo a la silueta de la mujer, la cual, desesperada, apresuró el paso. Cuatro de ellos comenzaron a correr detrás de ella, mientras que uno se quedaba atrás y preparaba su arma, un fusil pesado de francotirador RT-20.

Uno de los que corría, el más joven de todos ellos, no entendía la situación. ¿Por qué se necesitaban cinco mercenarios con armamento pesado para atrapar a una sola mujer? La misión no le agradaba, pero era la primera vez que podía salir con el grupo y no quería perder esa oportunidad. La mujer seguía corriendo y parecía no cansarse, pero pronto se escuchó un potente estruendo desde atrás, y la cabeza de la mujer estalló de golpe, manchando el campo con su oscura sangre.

-¡Así se hace, Sniper! -gritó uno de los hombres, volteándose a ver al francotirador, el cual sólo alzó su brazo y mostró su mano con el pulgar arriba. Este se volteó a ver al muchacho. -Esto fue sencillo, ¿verdad? No tuviste que hacer nada, novato. Para la otra será.

El novato asintió antes de voltearse junto a los demás, pero uno de ellos lo detuvo poniendo su mano en su hombro, a lo que el joven regresó a su posición. El líder del escuadrón no se había movido, y con un gesto de cabeza le ordenó al novato que fuera a revisar el cuerpo. Este tragó saliva y se acercó lentamente a la mujer, apuntando a la misma dirección con su P90. En cuanto llegó, vio el cuerpo de la mujer tendido en el suelo, inerte.

Una gota de agua cayó en su frente, y después sintió como si le hubieran lanzado un balde de agua. Comenzó a llover y todo se oscureció, las nubes se cerraron por completo. El cadáver comenzó a deshacerse con la lluvia, como si esta fuera ácido. El muchacho miró sorprendido, mas no asustado. No era la primera vez que veía eso.

-¡Era un demonio de agua! -exclamó en voz alta. El cuerpo de la mujer demonio terminó de desaparecer, dejando atrás sólo sus ropas. O al menos a primera vista, ya que el novato vio que las ropas se movieron por un segundo.

Veloces pasos en la hierba alertaron al grupo de mercenarios, los cuales prepararon sus armas y apuntaban a la hierba alta. No podían ver qué era lo que provocaba ese sonido, pero sabían que no podía ser nada bueno. De la nada el sonido se detuvo, y el silencio sólo era quebrado por la agitada respiración del novato.

Un grito desgarrador hizo que todos se voltearan a ver a un desesperado Sniper, el cual se había levantado. Tenía algo colgando del cuello, era el bebé del demonio. El cuerpo del francotirador comenzó a perder envergadura, hasta que sólo quedó la piel reseca pegada a los huesos. Esa era la habilidad de los demonios de agua, absorber esta del cuerpo de sus víctimas hasta dejarlas en un estado momificado.

El demonio creció al tamaño de un niño y los mercenarios dispararon sin piedad, pero era demasiado rápido, sólo lograron despedazar los restos de Sniper. El líder alzó su diestra cerrada, y los que quedaban se agruparon en un círculo, espalda con espalda, apuntando a toda dirección. El novato tenía una expresión de pánico en su rostro, la cual se acrecentó al escuchar el grito del que antes le había hablado. El demonio le mordió el cuello con tanta fuerza que le rompió el cuello, y de paso le arrancó parte de la tráquea y la columna vertebral.

El líder y el otro mercenario dispararon nuevamente, pero el monstruoso ser ya se había ocultado en la hierba. El novato se acercó al caído en batalla, arrodillándose junto a él y cerrando sus ojos, los cuales ya habían perdido el brillo de la vida. Se levantó y retomó la posición defensiva junto al líder y al otro mercenario. El silencio regresó.

-¡Maldición! ¡Primero Sniper y ahora Knight! ¡Este demonio me las va a pagar! -exclamó furiosamente el mercenario, el cual sostenía su AN-94 de forma temblorosa.
-Debes calmarte, Maverick. -Susurró el novato con voz casi ausente. Estaba asustado, muy asustado. No esperaba que su primera misión fuera así.

Se escucharon los veloces pasos una vez más, y Maverick rompió la formación. Se lanzó al ataque, disparando como loco. El demonio recibió un par de balas, pero ningún daño severo. Las balas del mercenario se acabaron, y no alcanzó a recargar su arma. En un instante el demonio le arrancó la cabeza con fuerza bruta. El líder y el novato le dispararon, pero una vez más lo hicieron demasiado tarde.

Sin embargo, el demonio reanudó su ataque casi de inmediato, lanzándose a por el líder. Este, con un simple movimiento, esquivó la mordida que iba a su cuello al poner su mano, la cual perdió. El novato lo miró preocupado, pero el líder le mostro una anilla de granada en la diestra, la pérdida no había sido en vano. El demonio de agua estalló, y sus restos se deshicieron con la lluvia, la cual llegó a su fin.

El novato observó el campo de batalla y no pudo evitar que una lágrima rodara por su mejilla. El líder lo miró y posó su mano restante sobre el hombro del muchacho, dándole un apretón y una mirada significativa. Lo entendió enseguida, esas cosas pasaban en aquél mundo desquiciado, a veces a personas inocentes, por lo que los mercenarios eran la esperanza que estos tenían. Después de detener el sangrado de su muñón, el líder hizo un gesto de cabeza. Ambos mercenarios se retiraron, perdiéndose en la oscuridad para regresar a la base.

Je je je je un interesante one shot


estuvo bueno


pero tienes material para hacer una historia larga Heru


en fin espero por al conti??????


ja ja aj broam broma