Sangre y Acero- Occupation Zone

Sangre y Acero- Occupation Zone


Crónica 1: Sargento Nicholas “Nick” Peterson. 7ma Compañía Mecanizada de la Hermandad de Hierro.

"Bueno...por donde comenzar? Podría comenzar diciendo que vengo de un pueblo perdiendo en la Tierras Altas de Britania, allá en la Commonwealth. Lindo lugar, había un lago con esos extraños caballeros de rió, muy pintoresco también...aunque no mucha gente podía apreciar eso gracias a la neblina. Cerveza fria, con gente no tan fría, aire puro...un puesto de la Artillería Real donde podías ver todas las armas grandes en acción...

Si que si, el mejor lugar para crecer. Exceptuando a tu madre alcohólica, tu padre ausente y los matones del barrio..

Supongo que eso hizo que me enrolase, pero no dure demasiado con los Regulares...muchos montañeses somos demasiado “irregulares”para ellos (Je...), aunque adoraba la oportunidad de viajar y conocer el mundo pateando traseros así que bueno, me las amañe para entrar en al Hermandad de Hierro.

Tipos duros, mujeres guapas, sin oficiales estirados que nos dijesen que hacer. Fui así como llegue a Nipon: un contrato jugoso a cambio de quizás un tour de servicio del que no regresarías vivo...En este punto he de señalar que para entonces yo , al igual que muchos otros, estaba convencido de mi propia invencibilidad(dale un ametralladora Bren a cualquiera y se sentirá como el amo del mundo) pero cuando llegamos la cosa fue otra...

La primera semana perdimos a buenos chicos: Angus, McGregor, O´Brien...”Zona de Ocupación" no le hacia justicia a ese matadero controlado en teoría por los germanos pero que estaba lleno de esos ninja-samurais místicos que te escupen fuego antes de congelarte el trasero y cortártelo en rodajas...

We had to learn the ropes...Que distancia es segura, aprender a manejar un machete(por las dudas) , fabricar trampas, apreciar el valor de tanques y la artillería. Je recuerdo que tenia un arma de auxilio, Lucy, para mi arma de auxilio y dos machetes...bue no eran machetes en realidad era mas bien como cuchillos largos o espadas cortas. De ahí que mis amigos comenzasen a llamarme “Steely Nick” llevaba tanto a acero encima que apenas podía moverme...

Y bueno...nuestro accionar comenzó a  surtir efecto, los asaltos de los insurrectos se volvieron menos frecuentes, los confinamos a una región en la frontera con el Feudo del Fuego y acepte felizmente pasar el resto de mi servicio apostado en un pueblo cercano a Ostenburgh. Iba a ser perfecto: amigos, bebidas, chicas orientales...

...jamas me imagine lo que sucedería con eso ultimo

Recuerdo que la vi cargando verduras en un talego en su espalda, una muchacha tendría mas o menos mi edad ,tenia cabello oscuro y piel cobriza, tenia ojos de una dulzura que solo podria comprar con ya sabes...Los gatitos o los cachorros? Je, recuerdo que nunca tuve el valor para hablarle. Una noche estaba regresando al la barraca cuando escuche un maullido

Para mi sorpresa la encontre a ella, tratando de ayudar a un gato que había quedado atrapado debajo de un portn oxidado. Todavía recuerdo la mirada que me dedico cuando saque a ese animalejo de alli y ella se dedico a a acariciarlo...

...Una dulzura que no conocía. Mama se la pasaba borracha mientras me guardaba en el closet mientras atendía  a sus “clientes”, he tenido casi tanta suerte encontrando chica como suerte tuve en el sorteo de madres. Pero a ella no parecía importarle...no le importaba que fuese bruto, un occidental cubierto de armas y tiras de munición, no le molesto mi evidente incompetencia para los cumplidos ni mis olímpicas metidas de pata.

Shori, ese era su nombre. Jamas recuerdo haber sido tan feliz. Asi que en un flagrante despliegue de estupidez, supuse que eso duraria para siempre...  

Pasado un tiempo la comandancia hizo una rotación, yo fui destinado a una vanguardia en la “Zona Caliente” en la frontera con el Feudo del Fuego. Para ese entonces, Shori yo queríamos casarnos pero su familia no aceptaría que se casase con un occidental, en especial uno que posiblemente la dejase viudo en poco tiempo. Aun así, ella prometió esperarme, recuerdo que dio uno de esos abanicos de seda orientales como talismán de buena suerte.  

Fueron los seis peores meses de toda mi vida. Hasta el día de hoy me dan escalofríos recordarlos, el enemigo nos atacaba a toda hora, mientras almorzabas, mientras dormías, lloviese o nevase. Todos los días perdías a algún compañero y a los que no tenias que verlos regresar a casa...con un brazo o una pierna menos. El barro se mezclaba con sangre, formando esta arcilla rojiza que usábamos como mortero para trincheras.

Solo hallaba consuelo en la correspondencia que mandaba a Shori. There were some really close calls...pero por suerte yo era uno de los que habían aprendido bien: Manten tus pistolas cargadas, dispara en ráfagas, no desperdicies la munición, mantén la distancia segura...y si no prepara tu acero.

El final de mi tour de servicio coincidió con la llegada de la primavera, cerezos en flor por donde en mirases,aves cantoras y venados en prados con retoños abriéndose entre la hierba. Fue en ese clima idílico que decidí regresar al pueblo, a Shori.

Pero cuando regrese Shori no estaba esperándome, cuando la busque la encontré en brazos de otro hombre, cuando la encare al respecto ella me confeso que creía que habia muerto y me entere que su familia había retenido la correspondencia que le había enviado. Ella había encontrado consuelo en brazos de un amigo de toda su vida, Maikeru, un heishi que había perdido la vista en la Gran Guerra, pero cuyos sentidos eran tan afilados y su destreza con al espada era tal que no temía a las balas de los occidentales.

Mi tristeza fue casi tan grande como mi vergüenza así que en un arranque de ira lo desafié a que solucionásemos nuestra disputa como lo demandaba el Bushido, pelearíamos a muerte y el vencedor desposaría a Shori.

La noche anterior a la batalla, mientras yo inspeccionaba el terreno de combate en busca de trampas puestas por su familia, que deseaba mi derrota, ella vino a mi. Se quebró en lagrimas y me suplico que no acudiese al duelo pues temía por mi vida. No si fue el orgullo lo que me impidió ver, o si realmente la amaba tanto como para arriesgar mi vida. Pero no hubo caso. Mi suerte ya estaba echada.

A la mañana siguiente nos encontramos Maikeru y yo. Un día que jamas olvidare...”

Afueras del Pueblo de Seido, 50km de Ostenburgh, 8:46 a.m hora local.

El trino de un ruiseñor quiebra la quietud fantasmal de un paisaje cubierto por una espesa niebla, un brisa siniestra mese las hojas del arboles y crea leves ondulaciones en una charca antes de que pasos pesados comiencen a  escucharse y pronto dos siluetas se vuelven visibles entre la bruma.

Una de ella carga una mochila y esta ataviada con un uniforme militar color oliva con una chaqueta parda con su cabeza protegida por un casco de acero. Lleva a sus espaldas dos kukris de diseño oriental enfundados en cuero. Sosteniendo en sus manos un sub-fusil Thompson mientras que masca un poco de paja

Spoiler:

Su rival aparece ataviado con una vieja armadura samurai, con viejas cicatrices de combate todavía visibles las cicatrices de viejas batallas, sus ojos están cubiertos por una venda lleva al cinto dos katanas y lleva atada a en su frente una cinta de seda negra con bendiciones de los dioses bordadas en hilo de plata

-Aun no es tarde para que te arrepientas, da media vuelta y podras irte en paz, occidental- clama Maikeru en voz severa mientras Nick escupe la paja que ha estado masticando.

-Irme en paz? No, no, no ,ojos de halcón. He venido para quedarme.  Hiciste un buen trabajo cuidando de   mi chica, es momento de que me la devuelvas...

-Shori ha hecho su elección...

-Hizo su elección porque pensaba que estaba muerto. Y porque los viejos buitres de su familia le mintieron!-grito Nick- No voy a dejar que ningún payaso vestido con traje de hojalata  me aparte de la mujer que amo...

-Entonces que así sea, Peterson-San- en un movimiento impecable, el desenvaino rápidamente su espada y corriente de aire que causo provoco un corte en la mejilla del occidental

Nick solo tuvo unos segundos para reaccionar antes que una nueva ráfaga de aire producida por un nuevo movimiento de la espada de su rival, soplase hacia el, rodó por el suelo ,esquivando por muy poco el ataque que partió por la mitad un macizo roble que se hallaba a sus espaldas, para luego tomar cobertura detrás de una solida roca.

El occidental respondió vaciando el cargador extendido de su arma sobre su oponente, pero el con el filo de su espada todos y cada uno de los proyectiles en un movimiento tan veloz que parecía que el guerrero se hallaba protegido por un halo de aire que rechazaba los proyectiles.

Segundos después, Nick lanzo una granada hacia Maikeru que desapareció en la consiguiente detonación. El soldado suspiro aliviado esperando que ese fuese el fin de la contienda, sin embargo, al voltearse descubrió que su rival se hallaba delante de el y anda pudo hacer cuando el hundió su acero  profundamente en el hombro de Nick inclusive atravesando la roca detrás de el.

-Has sido arrogante, Peterson-san---afirmo el guerrero mientras el soldado gruñía de dolor-...realmente pensaba que bastarían un par de balas para derribarme...?

-...Y tu realmente pensabas que vendría aquí sin un plan?-dijo Nick con una sonrisa feroz

Luego uso su otro brazo para jalar de un fino  cable que activo una trampa, una pesada esfera de barro, armada con afiladas picas de bambú que se balanceo con fuerza hacia el oriental. Maikeru reacciono para cortar el artefacto pero al hacer libero el brazo de Nick, que uso para hacir su pistola  y disparar contra su oponente logrando impactar  en uno de sus antebrazos y en su vientre.

Maikeru flaqueo, retrocediendo unos pasos, y al hacerlo escucho un cliqueo debajo de sus pies. Inmediatamente una mina saltarina se elevo del suelo y de no ser por la velocidad de los movimientos y reflejos del guerrero el combate habría acabado allí.

-Perro Occidental, debí suponerlo...-dijo Maikeru lleno de ira mientras se cubría las heridas.

-Se que Shori debe haberte dicho que soy un idiota, pero me he mantenido con vida gracias a una regla simple: jamas luchar en los mismos términos que tu enemigo. Y así, mientras tu meditabas y escribías tus pateticos haiku, yo prepare este lugar para que sea tu tumba.-

Luego Nick extrajo de un escondrijo una pesada ametralladora Browning M37

Spoiler:

El occidental desplegó una densa cortina de fuego hacia su rival que debio hacer uso de todas sus habilidades para desviar la ininterrumpida ráfaga de muerte que era proyectada hacia el. Una vez se agoto la munición de la ametralladora, el soldado volvió a recargar velozmente su Thomson y cargo disparando hacia Maikeru que estoicamente continuo desviando los disparos para luego desechar también el sub-fusil y continuar cargando empuñando dos pistolas.

Una vez los cargadores se vaciaron, Nick desenvaino sus dos kukris y acometió con Maikeru bloqueo el tajo vertical del soldado dando lugar a un duelo de fuerza en el ambos se rehusaban a ceder ni un centímetro de terreno. Sin embargo, el occidental comenzó a empujar a su oponente hacia el centro de la charca y logro tumbarlo en el agua.

Intento espetarlo contra el suelo pero una patada ascendente del oriental logro apartarlo, un par de patadas giratorias lograron  aturdirlo y luego un potente golpe a puño abierto mando a Nick a volar lejos dejándolo sin aire, tendido sobre la hierba.

-Bien intento, Peterson-San, latima que- Maikeru interrumpió su monologo cuando escucho que todas las ranas y salamandras de la charca saltaban, alejándose de ella.

Nick volvió a  sonreír mientras sostenía triunfante un control remeto el cual activo segundos después, luego la charca y todo a su alrededor exploraron en una vistosa columna de tierra negra, lodo y polvo que se elevo por encima de la linea de arboles haciendo notable en el pueblo junto con el gran estruendo que provoco.

Una muchacha en el mercado ,vio dicha señal, y dejo caer los bienes que transportaba precipitándose hacia el lugar del suceso.

Nick tosió a causa de la mugre de la detonación, pero se incorporo triunfante ayudándose de uno de sus machetes para incorporarse.

-It´s finally over...-dijo aliviado. Un silbido detrás suyo volvió a contradecirlo.

No tuvo tiempo para evitar que su oponente hundiese un afilado tanto en muslo y luego clavase su espada en el brazo sano de Nick. Si Maikeru pudiera haber proseguido con su ataque la victoria habría sido suya, pero la explosión de la había dejado malherido y atrás apuñalar a su oponente su arrastro por el suelo apresurándose a despojarse de su armadura, que ahora era poco mas que escoria ardiente que le quemaba la piel.

Nick se arrastro por el suelo, dejando tras de su un rastro carmesí finalmente logrando arrodillarse viendo todo a su alrededor borroso, como manchones de distintos colores y con los cuervos que se reunían en un roble muerto como puntos negros que graznaban jovialmente en anticipo al festín. Sin embargo entre las brumas logro distinguir algo con nitidez.

Esa misma piel cobriza, ese cabello oscuro, esa mirada dulce como la miel...como una joya de ámbar entre la tierra negra. Sonrió melancólicamente en lo que volvió a  sentir el filo de la espada de Maikeru en su cuello.

-A pesar de todo, tus artimañas no te han servido para triunfar. Luchas sin honor, no mereces la victoria...

-Jejeje...Honor? Amigo tu crees que estaría aquí si importase algo tan trivial como el honor? He despreciado mi hogar, a mis compañeros que sangraron conmigo, a mi propia vida por enfrentarte a ti...Ya no me queda nada...

-Entonces porque? Porque te aferras tanto a la vida?- Nick enfoco Shori.



-Porque hubo una vez...en que no todo lo que tenia era nada. En que no todo era metralla, fuego y sangre. Recuerdo que había suavidad y flores abiertas. En que en mi piel había caricias y no heridas infectándose en la mugre...Porque hubo una vez en que hubo algo importante para mi, quiero vivir si algo de lo que yo creí era cierto...-la muchacha comenzó a derramar gruesos lagrimones.

-Realmente crees que la mereces mas que yo...?

-No...para nada soy un idiota, no soy bueno para anda fuera de hacer daño a los demás. No se hacer arte, no soy gracioso, divertido, ni atlético. No tengo riqueza y lo único que tengo que ofrecerle es mi pobreza...Pero la amo.. -Maikeru guardo silencio un instante.

-Yo respeto eso. Si yo no estuviese con ella, desearía que estuviese contigo, Peterson-san...

-Lo mismo digo, ojos de halcón. Lo mismo digo...-dijo Nick encendiéndose un cigarrillo mientras su rival alzaba su espada.

La muchacha cubrió su rostro con sus manos.

-Por favor, paren...--decia ella.

Cuando ella cero de Maikeru comenzó a descender, Nick alzo una escopeta disimulada entre las hierba y aprovechando el momento de vulnerabilidad de su oponente, dio un giro y disparo, catapultandolo hacia atrás por el impacto.

Spoiler:

Nick uso las fuerzas que le quedaban para alzar su Kukri y se aproximo para rematar a Maikeru que a su vez se puso de rodillas, listo para afrontar su final con honro mientras le venda de sus ojos caía revelando la retina blanquecina de estos.

-Hazla muy feliz, Peterson-san- dijo el guerrero con una sonrisa.

El soldado asintió y alzo su filo para asestar el ultimo golpe y filo comenzo a  descender...

-POR FAVOR NO!!-grito Shori



El filo de su arma se detuvo a unos centímetros de su rival, Nick se volteo hacia Shori que lloraba desconsoladamente, la miro un instante y luego bajo la cabeza enfundando su arma y se alejo cojeando en dirección opuesta, se volteo un instante para mirar a la muchacha que abrazaba estrechamente a  Maikeru mientras lloraba y atendia a sus heridas.

Sus miradas se encontraron por ultima vez y luego el partió. Las lagrimas surcaban su sucio y ensangrentado rostro mientras se perdía entre la neblina.

“No hubo necesidad de un ganador: ella dejo claro a quien amaba mas.

Por donde lo miren yo fui el gran perdedor de ese día...perdí a  la única mujer que he amado y tuve que seguir viviendo. Durante días desee morir por mis heridas, aunque mis camaradas me alentaban simplemente no podía olvidar...el dolor era demasiado grande. Mas grande que todas las heridas que  he recivido en el frente...

Después de eso abandona la Hermandad y trabaje de independiente esperando que los riesgos del trabajo me ayudasen a  olvidar hasta que finalmente me dedique al negocio de armas, pero allí rodeado de los artefactos de dolor que forjaron mi vida...jamas olvide que hubo algo mas en mi vida: que no era dolor, ni fuego, ni sangre, ni ira, ni odio, ni sobrevivir...que un día hubo algo mas. Pero esos días ya no transcurren bajo mi cielo y brillan bajo el sol de alguien mas...

Finalmente volví a retomar un habito que tenia muy abandonado. Le rece a mi Dios...

-....por favor acorta mis dias en este infierno...concedeme morir pronto y en paz...”

Oh pobre Nick, que vida mas injusta para el pobre, un poco de gasolina, y agua hervida para apagarles las llamas vendrian muy bien para la familia de Shori

por otro lado el dare devil orienta se lucio je je je, aunque bue me sorprendio que haya sobrevivido a tantas trampas, pero bue no fue su habildiad lo que le permitio seguir vioviendo, fue Shori.

Me gustaron las OST, encajaron perfectamente con los momentos je je je, aunque lastimosamente Maikeru sobrevivio, pero bue veamos si en algun momento se le acba la suerte je je je.

En fin espero por mas minientregas de esta indole

¿Cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia?

Bueno, grandes genios han sacado de sus momentos más oscuros algunas de sus mejores obras, es obvio como contigo esa no es la excepción.

Magnífico relato, una excelente construcción de los personajes en muy pocas líneas, una batalla espectacular y final amargo...

Me ha gustado mucho, esperemos pronto una publicación el hilo principal de esta historia.